Células de presión
Las celdas de presión se utilizan para controlar las presiones que actúan sobre el contacto entre una estructura de soporte y un suelo de empuje, siendo esenciales en obras subterráneas, muros de contención y túneles.
Estas celdas consisten en un pulmón rectangular de acero lleno de aceite especial y conectado a un transductor eléctrico que convierte cualquier variación de presión en una señal eléctrica estándar de 4 ÷ 20 mA.
Diseñadas en varias versiones, son extremadamente versátiles y se adaptan a distintas necesidades de montaje. Se suministran en diferentes formas:
- Sin manguera hidráulica y con el transductor montado directamente en la celda, en posición horizontal o vertical
- Con manguera hidráulica para carga y transductor montado en la celda o en la manguera
En particular, el segundo tipo tiene la característica de ser represurizable gracias a una válvula de llenado instalada en el extremo de una manguera hidráulica de rilsan, con una longitud estándar de 1,5 metros.
La represurización de la celda es necesaria, por ejemplo, cuando el pulmón queda inmerso en hormigón que, durante su consolidación, puede contraerse y generar un defecto de contacto entre el pulmón y el hormigón.
Mediante esta operación es posible restablecer el contacto total entre el pulmón y el hormigón, garantizando el correcto funcionamiento del instrumento.
La lectura de los datos del transductor de presión puede realizarse a través de una unidad de control portátil o mediante un sistema automático de adquisición de datos que permite el seguimiento continuo del comportamiento estructural.